Aprovechando estos días de confinamiento, he tratado de buscar ocupaciones que tenía un poco dejadas de lado porque el trabajo me lleva mucho tiempo. Pero ahora con la cuarentena, he vuelto a mis hobbies y con un poco de imaginación he realizado unos trabajos muy chulos.
Uno de ellos ha sido realizar un cubreradiador a partir de un palet de madera. Ha sido un trabajo muy laborioso y he necesitado la ayuda de mi marido (es muy manitas) pero ha merecido mucho la pena hacerlo. Todos los pasos están explicados en mi otro blog de reciclaje, os doy el enlace para que lo veáis:
Pero hoy os voy a enseñar un trabajo que es mucho más fácil pero muy bonito. Yo tenía otro plan en mente pero ha sido mi hija quién ha dado su idea y me alegro de haberle hecho caso. Laura quería plasmar un recuerdo de nuestro último gran viaje por Italia en familia, el verano pasado. Ella también va siguiendo mis pasos con la decoración y la pintura. Incluso, ya pinta mucho mejor que yo!!!
He recuperado una tabla redonda y pequeña que tenía guardada porque no tenía utilidad, y le he dado un toque decorativo muy bonito y original.
Vamos viendo los pasos:
El tablero estaba agujereado en el centro por lo que he tenido que rellenar con masa de madera de color pino y una vez seco, he lijado para dejarlo listo y poder pintar.
Lo siguiente ha sido darle una base de pintura al agua de color carne. No importa que esté mal dado puesto que quiero dejar el efecto "vintage". Con una mano es suficiente.
Luego he dado unos trazos de color marrón con un pincel que tiene los pelos en abanico. Así le damos otro efecto más "viejo".
Cuando esté seco, le pasamos un poco de cera en algunas partes del tablero pero no mucho. Ésto hace que cuando pintemos encima, la pintura no coja bien y se vea la capa de debajo.
Ahora vamos con la última capa con pintura de color tapioca (la elección de los colores es libre por supuesto). Utilizamos de nuevo el pincel de pelos en abanico para crear ése efecto de "mal pintado". Y lijamos para levantar la pintura en las partes dónde pasamos la cera.
Y pasamos a pintar el recuerdo!!! Buscando en internet, encontré una imagen del coliseo de Roma. Me sirvió de modelo para dibujarlo en la tabla. Primero con el lápiz para poder rectificar si es necesario y luego con la pintura marrón.
Luego añadimos el título en éste caso ROMA en estilo romántico y de otro color. Elegí un color azul Agua Marina y para que resalte aún más el nombre, lo perfilamos con el color marón.
Cuando esté acabado, protegemos la tabla con barniz satinado en spray. Y añadimos un lazo de organza marrón para crear romanticismo.
La pequeña obra colocada al lado de la estatuilla que representa la Diosa Venus de la obra "El Nacimiento de Venus" de Sandro Botticelli, queda precioso, DIVINO!!! Es una manera de recordar buenos momentos con poco material y de forma muy original.
ESPERO QUE OS HAYA GUSTADO. HASTA LA PRÓXIMA
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